¿compatibles o incompatibles?

• ¿novio-amigas?
• ¿novia-amigos?

qué alguien me dé una (buena) razón por la que no se mezclarían estos grupos de gente en situaciones normales.

(a ver si así puedo entender)

Facundo y Martín: 5 años.

save the children, please.

- shhh, no digas eso.
- ¿por qué?
- retenciones es una mala palabra, mi mamá me dijo.

un 28 de Abril como si fuera 1492

¿Me dice lo que le pasa, por favor? ¿Se acordó, Saavedra, de aquella vez que me invitó a dormir con usted? ¿No me dice lo que está pensando ahora?
Mientras lo miro en este instante, me quiero asegurar de que sea así, de que inevitablemente usted se acuerde un ratito.

[ Víctima reconoce al victimario como tal ]

Tal nivel de aproximación era demasiado pedir, pero usted entiende: a veces me cuesta tanto poner verbalmente lo que pasa adentro, los componentes psiquícos no son fácilmente accesibles, mi ortografía emocional es ilegible y con esto no pretendo excusarme de nada. Mi conciencia se reconoce a si misma como culpable, pero al mismo tiempo inimputable.
¿Acaso usted pretendía burlarse de mi ingenuidad? ¿O era un goce especial el ver mi cara ante semejante propuesta? ¡Supo ser usted, un desubicado! Sepa disculpar mi brutal sinceridad... pero no pretenda que sus intenciones pasen desapercibidas.

[ Síndrome de Estocolmo ]

Simplemente, Saavedra, quiero que sepa. La distancia sutilmente calculada entre sus tendencias y las mías fué encontrando su atajo en esos retazos de piel que poco a poco supo invadir, y que más tarde llegó a dominar.
Quien haya dicho que la perseverancia no tenía fines productivos es porque jamás comprendió el papel importantísimo que cumplía la motivación en todo el proceso.
Ahora le digo Saavedra, otra cosa: sabe sorprenderme día a día.
Por estas ocasiones, me preguntaba si alguna vez podría descifrar yo, la lógica de sus tácticas. ¡Tanta simpleza a la vista y yo tan confundida! ¡Conquistada por una estratagema tan simple que hasta llega a ofender!

[ Víctima se convierte en victimario ]

Ay Saavedra... nunca subestime la pasividad. Puede que un día se sorprenda y acabe yo por colonizar no sólo lo que me deja ver, sino todo aquello que usted no llega a comprender.
Ahora invíteme otra vez a dormir con usted, y déjeme que lo sorprenda con una respuesta imprevista, de ésas que ocasionan una cara de circunstancia y un descoloque a medias. Pregúnteme si puede usted suspirar en mi cuello, mientras encuentro el goce de recorrer su espalda con la yema de mis dedos.
Dígame Saavedra, que no encuentra las palabras, al igual que yo para expresar todo eso que pasa adentro, cuando un "buen día" se traduce como un acto de amor en las mañanas de Santiago y sabe usted pintar con acuarela mis ocasos.
Dígame, Saavedra, mientras comparte conmigo esas otras ideas locas que se le ocurren mientras me vé dormir.
Venga un poquito más acá, que yo también quiero compartir estas ganas locas de estar con usted...

pregunto: ¿verdadero o falso?

PG-16

cuando una mujer está enamorada, la felación es prueba fehaciente de ello.

"mi mamá es psicóloga"

En 1896, el Dr. Freud publica un artículo llamado "Nuevas Observaciones sobre las Neuropsicosis de Defensa". En él, explica el mecanismo defensivo de la histeria y de las obsesiones, justificando la diferencia entre sexos, y la predisposición del sexo femenino a la conversión histérica así como la tendencia masculina a la obsesividad.

Siendo Juancito un niño de apenas 10 años, su mamá le dijo:
"Vaya y juegue al doctor con la vecinita, mi amor, juegue a la maestra y usted sea el alumno, que no quiero obsesivitos ni histeriquitos en ésta casa...."

Tal es así, que Juancito creció un sujetito casi normal, si no fuera por su mamá.